El gobierno italiano evalúa la posibilidad de alojar migrantes en inmuebles que hayan sido confiscados a las organizaciones del crimen organizado.
El Ministerio del Interior considerará esta semana poner a disposición de refugiados los inmuebles que pasaron a manos del Estado tras ser quitados a la mafia, asegura este lunes el diario La Repubblica en base a fuentes anónimas de la cartera.