La Cámara Federal de Rosario confirmó los procesamientos por presunto lavado de activos para el basquetbolista Carlos Francisco Delfino quien en abril pasado fue acusado de vender una casa en un country de Santo Tomé al narcotraficante prófugo Vicente Matías Pignata, operación que para los investigadores estuvo destinada a blanquear dinero de origen ilícito.
La resolución conocida ayer también ratifica el fallo de primera instancia para Carlos Gustavo Delfino, el padre del deportista y apoderado de una off shore que figura como dueña de la propiedad, así como para la pareja de Pignata, Elizabet Yanina Campos, y el padre de ésta, Ramón "Colo" Campos, acusado como testaferro.
Con la firma de los jueces José Guillermo Toledo y Elida Isabel Vidal, la Sala B de la Cámara Federal de Rosario respaldó los procesamientos dictados en abril por el juez federal Nº 2 de Santa Fe, Francisco Miño, a partir de una investigación encabezada por el fiscal federal capitalino Walter Rodríguez según la cual Pignata y su pareja pusieron en circulación dinero proveniente de la venta de drogas con el cual construyeron un patrimonio que incluye siete importantes propiedades y más de 10 autos.
Investigados
Vicente Pignata está prófugo de la Justicia Federal, con dos pedidos de captura. Uno fue emitido por un tribunal oral santafesino que en 2017 lo condenó a cuatro años de cárcel por "tenencia de estupefacientes con fines de comercialización". El otro requerimiento fue emitido por el juez Miño en el marco de la investigación sobre sus bienes presuntamente adquiridos a partir de esas actividades.
Esta investigación del fiscal Rodríguez se conoció en agosto de 2018 cuando se realizaron cinco allanamientos en Santa Fe, Santo Tomé y la localidad mendocina de Bowen. Tras el operativo fueron indagados la esposa de Pignata, acusada de lavado de dinero con fondos provenientes de la actividad de su marido. Asimismo, el padre de la mujer quedó sospechado de obrar como testaferro por registrar a su nombre bienes adquiridos por el matrimonio.
Las sospechas contra los Delfino se relacionan con la dudosa cesión de una propiedad ubicada en el country El Paso de Santo Tomé que estaba a nombre de la off shore uruguaya Parmery Trading SA que la cedió mediante un contrato de comodato gratuito por 95 años al basquetbolista. Y éste luego celebró con Pignata un contrato de alquiler con opción de venta por 500 mil dólares.
El pasado 1º de abril el juez Miño procesó a los Delfino, a Campos y al padre de ésta por lavado de activos, resolución que fue apelada por los defensores.
Apelaciones
El abogado de los Delfino, Néstor Oroño, pidió la nulidad del procedimiento por "total falta de fundamentación". El letrado tildó de "falaces y artificiosos" los argumentos del fiscal. Dijo que Rodríguez intentó confundir y relacionar cuestiones totalmente ajenas como la ingeniería societaria de Parmery Trading con las operaciones de Pignata y Campos.
Además remarcó que la única operación que vincula a sus clientes con el narco prófugo y su esposa es la referida al inmueble de El Paso y que más allá de eso no hay indicios para vincularlos. También subrayó que los Delfino no tenían por qué conocer el origen de los fondos con los que les pagó Pignata y que sin pruebas sobre ese conocimiento previo no se les puede imputar un delito como el lavado de activos.
Asimismo Oroño cuestionó las acusaciones contra el basquetbolista y su padre teniendo en cuenta que Pignata y Campos hicieron muchas operaciones con inmuebles y vehículos pero sólo a sus clientes se los investigó. Por eso se quejó de que sólo esa operación haya sido puesta bajo la lupa y alegó que los Delfino fueron "discriminados" porque les exigieron deberes jurídicos inexistentes que claramente no se les exigieron a las demás personas que hicieron operaciones con Pignata y Campos.
La defensa de Campos y su padre también apeló. Sobre el Colo, alegó que el hecho de aceptar que puso a su nombre tres vehículos en diferentes tiempos a pedido de su hija y su pareja no lo hace cómplice de lavado. Respecto de la mujer, sostuvo que las operaciones de compra y venta fueron declaradas ante la Afip sin simulaciones ni ocultamientos sobre el origen del dinero. Afirmó que uno de los inmuebles objetados se está pagando y que la casa de El Paso fue alquilada con una opción de compra que no se concretó.
Por su parte el fiscal Claudio Palacín respaldó la resolución de Miño. Consideró corroborado que Yanina puso en circulación dinero proveniente del narcotráfico con conocimiento de su procedencia ilícita para comprar autos e inmuebles. En ese sentido sostuvo que su padre participó de esas maniobras al registrar a su nombre bienes adquiridos por su hija. Y respecto de los Delfino deslizó que "facilitaron el andamiaje jurídico diseñado con anterioridad y en provecho propio" y que, "más allá de lo expresado por su defensa tenían pleno conocimiento de las maniobras ilícitas".
Responsabilidad
Sobre el planteo de Oroño los camaristas desestimaron la arbitrariedad al señalar que el fallo está "debidamente fundamentado". Además respondieron que "se puede incurrir en el delito de lavado con dolo eventual". Luego analizaron la evidencia contra los Delfino y deslizaron la responsabilidad que podría caberles en las maniobras.
Consideraron relevante que la casa adquirida por Parmery Trading haya sida cedida en comodato gratuito por 95 años al basquetbolista. "La extensión temporal supuestamente no onerosa es un indicio sustancial para afirmar un ligamen distinto al invocado y cuyo fin, en el contexto de esta causa, resulta ser el ocultar el verdadero rol de los ocupantes del inmueble", dijeron los jueces, que también pusieron la lupa sobre el poder que la off shore concedió a Delfino padre como apoderado.
Para los camaristas hay evidencia de que los Delfino habrían intentado disimular la cesión de la propiedad bajo la apariencia de un contrato de alquiler. "Si bien no tuvieron vinculación con la maniobra previa de narcotráfico, tuvieron conciencia de que el dinero para la compra del inmueble era de origen ilegal, ya que les facilitaron un andamiaje jurídico diseñado con anterioridad y provecho propio para la ocultación de sus verdaderos titulares, cuya administración mantiene simbólicamente Carlos Gustavo Delfino".
Además remarcaron que, más allá de lo que declararon al ser indagados, "no están agregadas a la causa las constancias alegadas como contrato de locación, comprobantes de pago del alquiler y servicios del inmueble". Tampoco encontraron explicación a las amplias facultades para realizar reformas a la propiedad otorgadas a los inquilinos Pignata y Campos.
"La defensa expresa que no constituye lavado si alguien le vende a otro algo sin importarle de dónde salió el dinero para comprarlo si se ha seguido el procedimiento estándar para el tipo de operación que efectúa. Pero, claramente, ese procedimiento estándar no se siguió en el caso", concluyeron los camaristas sobre las acusaciones contra Delfino y su padre, quienes transitan el proceso judicial en libertad.
Presos
Sobre la situación procesal de la esposa de Pignata y de su padre, los jueces también respaldaron el fallo de Miño al tiempo que ratificaron la prisión preventiva para ambos. Respecto del padre, señalaron que hay peligrosidad procesal en virtud de escuchas que revelaron que tenía información policial previa a los allanamientos.
Y respecto de Yanina, se recuerda que fue arrestada la semana pasada cuando se retiraba en un auto del barrio costero de La Guardia, al este de la capital santafesina. Sobre ella pesaba una orden de detención por no cumplir —por segunda vez— con la prisión domiciliaria que le habían concedido oportunamente en el marco de esta causa por la cual no podía moverse de una casa del distrito Colastiné.
Fuente: La Capital