Los tatuajes han dejado hace rato de ser algo de pocos; casi se podría decir que hoy en día es más difícil encontrar un joven sin tatuajes que a uno con algún dibujo en la piel.
Como toda tendencia, está en constante evolución, y uno de los diseños más novedosos que se pueden encontrar en la actualidad es el tatuaje blanco.
Los tatuajes blancos, suelen ser la opción más discreta y sutil entre muchas personas que prefieren esa alternativa para incursionar en el mundo de la tinta en la piel. De esa manera, pueden contar con un tatuaje menos colorido o llamativo, en comparación con los clásicos de tinta negra o color.
A pesar de los puntos a favor, existen dos desventajas. En los tatuajes blancos, la luz del sol puede hacer que se vuelvan amarillos. Además, tienen menos durabilidad que los convencionales.
Si bien son las principales desventajas, en los últimos tiempos, los tatuajes blancos suelen ser los preferidos porque pueden combinarse con otros tonos y crear diseños increíbles, sumado a que al sanar, el tatuaje tomará una particular textura.
Fuente: El Diario