Leo Messi logró al fin lo que tanto quería: estar en casa tomando unos mates con su familia y la Copa del Mundo. La 'Albiceleste' llegó de madrugada, así que no había tenido tiempo para descansar mucho. Ahora, afronta las celebraciones.
Leo Messi lo ha conseguido. El sueño de toda una vida es realidad: es campeón del mundo con Argentina. Las imágenes que la afición imaginaba ilusionándose con la conquista del trofeo se están convirtiendo en ciertas: cuando el capitán aparece levantando el entorchado, no es parte de un montaje, sino de lo que ocurrió de verdad en Catar. La 'Albiceleste' derrotó a Francia en tanda de penaltis en la final.
En su perfil de Instagram, el '10' compartió una foto que llevaba mucho tiempo queriendo exhibir. Se mostró durmiendo y despertando con la Copa del Mundo. Él mismo, en su comparecencia de después del enfrentamiento con los galos, dijo que tenía muchas ganas de ir a casa para tomar unos mates y estar tranquilo y relajado con su esposa, Antonella, y sus hijos, así que, al fin, cumplió este deseo.
Sus compañeros y aficionados no tardaron en llenar de comentarios de mensajes de cariño y de celebración por la gesta llevada a cabo. Algunos bromearon con que, a partir de ahora, deberán ser tres en su cama. Otros se limitaron a recordarle lo épico de la noche en que consagró al fútbol de todo su país. Él, con dos goles, formó parte inherente no solo de la victoria en el último duelo, sino de los avances en todo el campeonato.
"¡Buen día!", escribió Messi en su 'post' de Instagram junto a un emoticono sonriente. Todavía le queda mucho camino antes de terminar esta rueda de la felicidad, pues aún han de tener lugar los actos 'oficiales' de festejo por el Mundial. Ya ha habido una primera toma de contacto masiva con los hinchas, que se concentraron de madrugada para recibir a sus campeones y agasajarles mientras se desplazaban en autobús.