La segunda semana de junio cerró con una inflación del 1,5% en alimentos, con incrementos muy marcados en lácteos, verduras, azúcar y bebidas.
Los datos se desprenden de un estudio llevado adelante por la consultora LGC (Labour Capital and Growth), que registró un incremento del 6,8% en lácteos y huevos, un 4,5% en azúcar y un 4,3% en las verduras. A estos productos las bebidas (4,1%), las carnes (3,7%) y los panificados (3,7%). Por su parte, las frutas tuvieron un fuerte decrecimiento en sus precios que llega al 7,7%.
Del mismo relevamiento surge que en la segunda semana de junio el precio de los alimentos promedia un incremento mensual del 4,8% y, durante ese período, se registró una suba de 1,5% con relación a los siete días previos.
A priori, estos datos irían contra la posibilidad de que el número de la inflación mensual continúe bajando. La última medición, correspondiente a mayo, arrojó un 4,2% y la consultora consideró difícil que se perfore ese piso teniendo en cuenta las subas previstas por el gobierno para las tarifas de luz y gas.
El economista Enrique Szewach aseguró que la baja de la inflación que se registró en mayo esconde "algunas cosas artificiales", como tarifas y prepagas que no aumentaron ese mes, pero que sí lo hicieron en junio.
"Claramente hay una tendencia a la baja de la inflación, pero con algunas cosas 'artificiales', como tarifas que deben ser ajustadas y prepagas que volverán a su valor", sostuvo.
Para Szewach, "estamos en un contexto donde se celebra una inflación del 4,2% mensual, pero ese porcentaje es el que tienen los países vecinos en un año".
Según el INDEC, el Índice de Precios al Consumidor registró un alza mensual de 4,2% en mayo, menos de la mitad que en abril; en lo que va del año, acumula una variación de 71,9%.