Durante la tarde de este lunes, en el ex Centro Cultural Kirchner, se realizó un acto mileista/PRO, mezclado con música y alabanzas, de la Alianza de Iglesias Evangélicas de Argentina (ACIERA).
El motivo de la convocatoria fue celebrar de manera anticipada el "día de las iglesias evangélicas y protestantes", reconocida este año por ley nacional cada 31 de octubre, fecha en que en el año 1517 el monje alemán, Martín Lutero.
ACIERA asegura que agrupa 25 mil templos en todo el país y en su consejo directivo el Papa Francisco tiene algunos conocidos de su época de arzobispo, entre ellos el pastor Néstor Saracco y Alejandro Rodríguez. Sin embargo, ACIERA no lograr unir las llamadas iglesias históricas, las protestantes, de las que hoy muchos de sus referentes estuvieron ausentes, como el presbítero Marcelo Figueroa (el único evangelista que escribe en el diario del Papa), y el pastor Leonardo Schindler presidente de la Federación Argentina de Iglesias Evangélicas (FAIE).
La vicepresidenta de la Nación, Victoria Villarruel, se llevó aplausos, acompañados por hurras y silbidos en apoyo apenas se pidió que suba al escenario a dar unas palabras, "quiero reconocer la labor de servir al prójimo en las cárceles, comedores, en la recuperación de las adicciones, en la ayuda a los más vulnerables cuando a veces no llega el Estado" inició Villarruel, quien siguió su discurso ponderando que "el amor y la comprensión cristiana en valores como la defensa de la vida y la familia".
Villarruel continuó tratando de unir a los católicos y evangelistas en la "defensa de la libertad y la dignidad de la persona antes los embates ideológicos sobre valores fundamentales en la vida del pueblo".
El jefe de gabinete nacional, Guillermo Francos, acercó el saludo del presidente Javier Milei, pidió que cada 31 de octubre "nos encuentra hermanados por la república", además reconoció el "poder de la fe" y culminó el discurso comentó que está casado con una evangélica, "y convivimos en paz", comentario que hizo reír al público presente en las tribunas.
Los dos funcionarios nacionales que hablaron antes del presidente de ACIERA fueron vistos y escuchados en primera fila por la novia del presidente, Amalia "Yuyito" Gonzaléz, la canciller, Diana Mondino, y el joven pastor y ministro de Desarrollo Humano y Habitad porteño, Gabriel Maraida, cuyo padre, Carlos, es un famoso pastor a cargo de la "Iglesia del Centro".
Entre los presentes estuvieron el secretario de Culto, Nahuel Sotelo (quien prometió lograr la personería jurídica como iglesias, según reveló el presidente de ACIERA), la vicejefa de Gobierno porteño, Clara Muzzio, la directora de Cultos CABA, Pilar Bosca, también los diputados Diego Santilli, Nadia Márquez, Santiago Pauli, y ya terminado los tres primeros discursos apareció Cristian Ritondo (titular del bloque diputados del PRO). Por los intendentes dijeron presente el titular del municipio de San Vicente, Nicolás Mantegazza, y de Almirante Brown, Mariano Cascallares, pasando por el ministro de Seguridad bonaerense, Javier Alonso, y el director de Culto, Juan Torreiro. El embajador de Israel en Argentina, Eyal Sela, también fue mencionado por su presencia. Por la iglesia católica estaba el sacerdote Carlos White responsable en de la arquidiócesis de Buenos Aires del diálogo interreligioso.
También enviaron sus saludos cuatro gobernadores, de Misiones, Entre Ríos, Santa Fé y CABA. De las presencias no religiosas, ni políticas, estaban los periodistas Paulino Rodrigues, quien se mantuvo parado y detrás de todo, y Alfredo Leuco en las primeras filas.
En su discurso el presidente de ACIERA, el pastor Christian Hooft señaló "esta fe cristiana contiene millones de personas en el mundo, y en nuestro país, según la última encuesta del CONICET en 2019, ya éramos el 15,3% de la población, relevando nosotros unas 25.000 iglesias evangélicas”.