Este domingo se realizan en Paraguay las elecciones generales en las que se elegirá presidente, vicepresidente, parlamentarios, gobernadores y concejales departamentales. Los principales candidatos son el oficialista Mario Abdo Benítez (Partido Colorado), hijo del secretario privado del dictador Alfredo Stroessner, y Efraín Alegre de la Alianza GANAR, conformada por el Partido Liberal Radical Auténtico (Plra) y el Frente Guasú del ex presidente Fernando Lugo. La Constitución paraguaya no contempla segunda vuelta.
Las autoridades del TSJE se reunieron en la sede del organismo con cerca de un centenar de observadores internacionales de la Organización de Estados Americanos (OEA), la Unión Europea (UE) y la Unión Interamericana de Organismos Electorales (Uniore).
Los asistentes al acto eran una pequeña muestra de los 307 observadores internacionales acreditados, tanto de largo como de corto plazo, para supervisar el proceso electoral del domingo en los 17 departamentos de Paraguay.
“Estamos sumamente complacidos de la visita de todos ustedes en este momento que Paraguay está viviendo una fiesta cívica”, dijo el presidente del TSJE, Jaime Bestard, durante el acto.
Los observadores, reunidos en la carpa que cumplirá las funciones de Centro de Observación, pudieron conocer más del sistema electoral paraguayo a través de las campañas electorales del TSJE que se proyectaron durante el acto.
Entre otros, se informó del voto accesible para personas con alguna discapacidad o de la iniciativa “Educar para elegir”, que pretende crear conciencia electoral entre los menores de edad.
Durante el encuentro también se proporcionaron datos presupuestarios sobre el coste de las elecciones, que asciende a G. 88.000 millones (unos USD 15 millones).
“Lo que se gasta en elecciones no es un gasto, sino una inversión, porque redunda en la consolidación de la democracia”, aseguró el director general de Administración y Finanzas del TSJE, Olindo López.
Al concluir la presentación, los observadores pudieron conocer este Centro de Observación, habilitado con ordenadores, cargadores para móviles, varias pantallas de televisión y espacios para comer.
Algunos de los observadores internacionales también aprovecharon para preguntar a las autoridades electorales sobre sus primeras impresiones en el país, como la poca presencia joven y femenina en las listas electorales o la imposibilidad de votar de algunos funcionarios públicos o fuerzas del orden que se encuentren de servicio el día de la jornada electoral.
“Hay un incremento ciertamente en la participación a través de candidaturas, no obstante, el acceso es lo que no se tiene garantizado, por el lugar que ocupan dentro de estas listas de candidatos”, respondió el responsable de la Unidad de Participación Política, Marcelo Amarrilla.
En lo referente a la imposibilidad de votar de algunas personas, por cuestiones laborales, el director de Recursos Electorales, Luis Salas, recordó que el voto “es un deber y un derecho ciudadano, pero están las excepciones”, como los soldados, los funcionarios públicos que trabajen ese día o las personas que por razones laborales vivan a más de 50 kilómetros de su centro de votación.
Asimismo, desde este jueves, a partir de las 23.59 (3.59 GMT del viernes), está prohibido todo tipo de propaganda electoral y el sábado no se podrán vender bebidas alcohólicas desde la media tarde.
De las elecciones saldrá el nuevo jefe del Ejecutivo de Paraguay y el nuevo Congreso, además de las autoridades de las gobernaciones departamentales.
A la Presidencia se presentan diez candidatos, si bien quienes cuentan con posibilidades reales de alcanzar el cargo son Mario Abdo Benítez, por el gobernante Partido Colorado, y Efraín Alegre, líder de la alianza opositora Ganar.
Fuente: Nodal.am