Con la colocación del nuevo solado, la construcción de los retardadores pluviales y los desagües troncales y complementarios, avanza la remodelación de Avenida Freyre. A partir del trabajo simultáneo de cinco frentes de obra, distribuidos a lo largo de todo el corredor, las tareas presentan hoy un notable avance. "Esta renovación integral mira hacia el futuro. Este es el bulevar del siglo XXI, será una avenida moderna y bella que vamos a disfrutar durante muchas décadas todos los santafesinos”, destacó el intendente José Corral sobre el proyecto que comprende las 19 cuadras desde Bulevar Pellegrini hasta General López.

Es importante señalar que se trata de una obra surgida a partir del diálogo con los vecinos y las instituciones que tienen como objetivo reordenar los distintos modos de movilidad urbana en la zona, priorizando la seguridad peatonal y la circulación del transporte público. Asimismo, permitirá aliviar problemas históricos, como el de la intersección con calle Catamarca o el de la rotonda frente al club Unión, en el cruce con Bulevar Pellegrini.

Con un presupuesto oficial de $ 130.073.975,54, las tareas están a cargo de la UTE integrada por Cocyar y Pilatti y demandarán diez meses de ejecución. Vale destacar que la intervención se financia, en una parte, con un empréstito que toma el Municipio -autorizado por el Concejo Municipal- y el resto es afrontado con fondos propios del Gobierno de la Ciudad.

Frentes simultáneos

El subsecretario de Obras de Arquitectura, Lucas Condal, señaló que "con varios frentes simultáneos, la obra avanza a buen ritmo. En este momento hay tres frentes hídricos abiertos: uno sobre Bulevar, otro en calle Tucumán y el otro sobre avenida Freyre, a la altura del Catamarca".

En cuanto a la obra hídrica, que va desde la rotonda frente al Club Unión, hasta calle Naciones Unidas, detalló que "este desagüe ya está construído en un 50%, incluso ya hay un sector que cuenta con el nuevo pavimento. Ahora estamos con el último tramo que va desde Pte. Perón hasta la rotonda, sobre la mano norte". A raíz de estos trabajos se dispuso un operativo de tránsito en el carril Sur de Bulevar para garantizar la circulación en doble mano (circulación Este-Oeste y Oeste-Este), garantizando la circulación para el acceso de ambulancias del Hospital Iturraspe.

El segundo de estos frentes, "es el de calle Tucumán y San José, donde también el conducto pluvial está en buena parte ya construído, y ahora se avanza con el nuevo pavimento de hormigón", indicó Lucas Condal, sobre la intervención que permitirá resolver los anegamientos por los excedentes pluviales frente a la escuela. En tanto, el tercero corresponde al retardador pluvial en Catamarca y Freyre. "Allí, ya se trabaja en la excavación de los que serán los futuros amortiguadores pluviales. Entre Catamarca y La Rioja quedará a cielo abierto como un espacio paisajístico, con plantas y vegetación de agua; y entre la Rioja y Tucumán, quedará enterrado". Es importante señalar que este proyecto hídrico aliviará los anegamientos recurrentes, a partir de la retención del agua de lluvia, permitiendo así la circulación vehicular.

Nueva arquitectura

Lucas Condal indicó además que "desde lo arquitectónico, la obra también avanza en varios frentes. Entre General López y Corrientes ya se puede visualizar la nueva espacialidad con que contará el cantero. Allí se puede ver la nueva cinta peatonal, con las nuevas baldosas colocadas, y está marcada la bicisenda. La idea es, en aproximadamente un mes, habilitar un tramo, para que los vecinos ya puedan comenzar a disfrutar el nuevo paseo".

Contó que también "ya se inició el tendido eléctrico para la iluminación baja del cantero, que reemplaza a la anterior, con nueva farolas led. Un dato novedoso, apuntó, es la incorporación del sistema de riego por goteo para todas las zonas parquizadas del corredor, lo cual nos va a facilitar el mantenimiento de la vegetación". Finalmente, Condal indicó que siguiendo la planificación, "la intervención en la rotonda de Bulevar está prevista para el receso de verano, durante los meses de enero y febrero, a fin de que la obra impacte en menor medida en la transitabilidad de la zona".

Freyre y Bulevar

La reforma en la intersección con Bv. Pellegrini, a partir de la supresión de la rotonda actual y el reemplazo por un cruce semaforizado, permitirá ordenar la circulación vehicular en función de los tiempos y de los flujos prioritarios. Asimismo, en ese sector se incorporará un tercer carril en Av. López y Planes, mano al sur, y en Bv. Pellegrini en ambos sentidos; y se sumará una dársena para escolares frente a la Escuela IPEI.

En cuanto a la obra hídrica en marcha, se trata de la construcción de un desagüe troncal entubado de aproximadamente 650 metros, bajo la calzada norte de Bulevar, desde calle San Lorenzo hasta desembocar en el canal Irala, a la altura de calle Naciones Unidas. El nuevo conducto, en parte ya construído, cuenta con una sección rectangular de 1,50 x 1,20 metros, y permitirá sanear la zona frente a la rotonda del club Unión, evacuando los excedentes pluviales a partir, también, de la construcción de 17 puntos de captación superficial. Los trabajos prevén, además, la construcción de conductos secundarios y de conexión, bocas y tapas de registro.

A partir de la modificación vial, se incorporará un nuevo pulmón verde, de unos 3.300 m2, que incluirá parquizado, áreas de juegos infantiles y esparcimiento, arborización e iluminación, en el sector del playón actual, en el marco de las políticas de prioridad peatonal y de generación de espacios verdes que desarrolla el Gobierno de la Ciudad.

Soluciones pluviales

Otra de las intervenciones previstas en la obra, consiste en la construcción de un reservorio sobre el cantero central en la intersección de avenida Freyre y Catamarca. Actualmente, máquinas de gran porte ya trabajan en la excavación de lo que serán los futuros retardadores de agua al momento de las lluvias intensas. De esta manera se solucionará el anegamiento que se produce cada vez que llueve en esa intersección.

En cuanto al desagüe de calle Tucumán, está divido en dos tramos, y va desde Zavalla hasta conectarse con el existente en calle San José y La Rioja. El primero tiene una traza por calle Tucumán hasta San José con una longitud de 275 metros y una sección rectangular de 1,20 x 0,75 metros. En tanto, el segundo, con una longitud de 130 m y una sección rectangular de 1,20 x 0,60 metros,se extenderá por calle San José. Asimismo, los trabajos incluyen la construcción de bocas de registro y de tormenta, y de una colectora paralela de desagües cloacales que permitirá la correcta ejecución del pluvial.

En ambos casos, las tareas comprenden la remoción y reemplazo de árboles y toda otra infraestructura que interfiera con la traza de la calzada proyectada, como así también el corrimiento de los servicios subterráneos que obstaculicen la ejecución de las obras correspondientes. A la vez, se nivelarán las tapas de cámaras existentes y removerán los cruces y desagües entubados en desuso. Para lograr una correcta transición entre la obra nueva y la existente, se procederá al bacheo y las readecuaciones necesarias.

Diseño

El diseño del paseo contempla todas las premisas de accesibilidad: eliminación de desniveles en el recorrido, vados en zonas de cruce peatonal y losetas hápticas podotáctiles para personas no videntes. La intervención incluye la renovación e incorporación de mobiliario urbano (bancos, cestos, bolardos de protección, rampas peatonales, entre otras), y la incorporación de columnas de iluminación bajas en el cantero central.

Los nuevos solados serán de losetas graníticas de gran resistencia en los sectores de uso peatonal y de pavimento articulado de adoquines de hormigón rectangulares en los sectores de cruces vehiculares. El sector destinado a bicisenda se realizará con hormigón armado llaneado mecánicamente. Asimismo, se construirá una sendero podotáctil, materializado con Loseta cementicia tipo guía direccional. Previo a los cruces de calle y en correspondencia a las rampas peatonales losetas cementicias.

La propuesta retoma la idea del bulevar como espacio de paseo, y que fuera el origen de esta avenida, priorizando el uso de las áreas peatonales para la circulación, la recreación y el esparcimiento. Incluye los cruces de calles a nivel de veredas donde resulta técnicamente posible, dándole continuidad al plano de piso de circulación peatonal. En las bocacalles, donde existen pasos transversales de transporte público, o donde existe alguna exigencia de escorrentía pluvial, el cruce de calle se hace a nivel de calzada.