La construcción permite conectar, gracias a islas artificiales y gigantescos enlaces viarios, la isla hongkonesa de Lantau, al este, con la excolonia portuguesa de Macao, al oeste, y la ciudad de Zhuhai, en la provincia de Cantón.
El presidente chino, Xi Jinping, inauguró este martes el mayor puente marítimo del mundo, una enorme construcción que une Hong Kong, Macao y la China continental, en un momento en el que Pekín aumenta su dominio sobre la excolonia británica.
Esa infraestructura, de 55 kilómetros de longitud, incluye un largo puente de carretera sobre las aguas del delta del río de las Perlas y un túnel submarino.
"Declaro oficialmente abierto el puente Hong Kong-Zhuhai-Macao", dijo el presidente chino en una breve declaración, durante una ceremonia en la ciudad china de Zhuhai.
El jefe del ejecutivo hongkonés, Carrie Lam, había agradecido antes al presidente chino el haber inaugurado el puente en persona.
La obra faraónica, que comenzó en 2009, estuvo empañada por numerosos retrasos, sobrecostes, casos de corrupción y la muerte de varios obreros.
Autoridades e invitados especiales observan en una pantalla gigante imágenes del puente Hong Kong-Zhuhai-Macau, durante su inauguración en la terminal del puerto de Zhuhai el 23 de octubre de 2018
Para las autoridades, el puente impulsará los intercambios comerciales, uniendo de forma espectacular las dos orillas del estrecho.
Pero en Hong Kong, los detractores del proyecto consideran que no es más que otro intento de Pekín de aumentar su influencia en esta antigua colonia británica, que goza en teoría de una amplia autonomía, en virtud del principio "Un país, dos sistemas", decidido durante su devolución a China en 1997.
Los críticos con esa nueva conexión ferroviaria la consideran como un "caballo de Troya" de Pekín en Hong Kong, ya que implicó la construcción de una nueva estación en el centro de la excolonia británica, vigilada por agentes de seguridad chinos. (AFP)