Los cargos que se le imputan en este estado norteamericano van desde asociación para delinquir hasta importación y distribución de drogas duras como cocaína y heroína.

Guzmán fue entregado a las autoridades estadounidenses el 19 de enero de 2017, extradición que se sustentó, además de en delitos relacionados con el tráfico de drogas, concretamente ante las Cortes Federales del Distrito Oeste de Texas y el Dsitrito Sur de California.

Además, Guzmán cuenta con acusaciones pendientes en los estados de Nueva York, California, Texas, Arizona, Illinois y Florida por lavado de dinero, extorsión, secuestro, tráco de armas, sobornos y homicidio, tal y como ha recogido el diario mexicano 'Vanguardia'.

Sin embargo, el mexicano se ha librado de cargos, retirados por la Fiscalía de Estados Unidos con el n de acelerar los procedimientos judiciales. Según la defensa del narco, esta retirada de cargos se debe a que no existen evidencias sucientes para sostener que 'El Chapo' haya distribuido cocaína en Estados Unidos.

De los 17 cargos que pesaban sobre 'El Chapo', Estados Unidos ha retirado seis, relacionados con la presunta distribución de más de 6.500 kilos de cocaína entre 2006 y 2014 en territorio estadounidense. Aun a pesar de la retirada de cargos el sinaloense continúa enfrentándose a una condena de cadena perpetua. 

Si bien se desconoce la duración del proceso judicial, con esta reducción de cargos se espera que dure menos de cuatro meses, con lo que entre febrero se daría a conocer la sentencia que nalmente pesará sobre el mexicano. 

Tras haber conseguido huir del Centro Correccional Matropolitano de Manhattan, en el centro de Nueva York, la seguridad en torno a 'El Chapo' se ha convertido en una obsesión para las autoridades de la ciudad.

Guzmán solo tiene derecho a que le visiten sus abogados y sus hijas y a recibir dos llamadas telefónicas de 15 minutos al mes, con su madre y con su hermana, conversaciones, además, controladas por el Gobierno.

Para los traslados a la Corte se despliega un enorme dispositivo de seguridad, se ha tenido especial cuidado en la preselección de los testigos --que han sido sometidos a 120 preguntas--, y se mantendrán grandes precauciones a la hora de acreditar a medios de comunicación para la retransmisión del juicio por miedo a que miembros del cártel de Sinaloa se camuen entre ellos, ya sea con credenciales falsas o mediante extorsión.

Las sesiones de este enorme proceso judicial se desarrollarán de lunes a jueves entre las 10.00 y las 17.00 (horas locales), si bien este horario podrían variar por motivos de seguridad. 

Este lunes 5 de noviembre comenzará un proceso en el que Estados Unidos juzgará al mexicano por considerar que la mayor parte de su actividad delictiva ha sido desarrollada en este país, juicio que podría analizar con una condena de cadena perpetua para el histórico líder del cártel de Sinaloa.