El Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación, a cargo de Germán Garavano, pidió al Consejo de la Magistratura que abra una investigación para determinar si el juez federal de Dolores, Alejo Ramos Padilla, violó sus "deberes de imparcialidad y reserva" por las revelaciones que realizó en torno a una causa a su cargo cuando expuso el miércoles ante una comisión de Diputados en el Congreso de la Nación.
El magistrado denunció una “red de espionaje y extorsión política, mediática y judicial”, que tiene como una de sus figuras centrales al falso abogado Marcelo D’Alessio.
Para presentar la solicitud que impulsa un juicio político a Ramos Padilla, el Ministerio envió una nota al representante del Poder Ejecutivo ante el Consejo, Juan Bautista Mahiques, en la que advirtió sobre una aparente "finalidad política" del juez al realizar declaraciones ante la comisión presidida por el diputado Leopoldo Moreau.
La cartera que dirige Germán Garavano pidió al Consejo que se encarga de designar y remover magistrados que investigue el accionar de Ramos Padilla ante la “manifiesta actuación irregular y violatoria de los deberes de imparcialidad y reserva que todo juez debe guardar respecto de las causas que tramitan ante sus estrados y en resguardo de los derechos de las partes involucradas”, tras la exposición del magistrado en el Congreso.
Al respecto, cuestionó la actitud del juez por señalar "como verdaderos, extremos de la investigación que conforme sus propios dichos, todavía no han sido verificados”.
El ministerio pidió que se investigue si Ramos Padilla incurrió en incumplimiento de sus funciones de juez porque “hizo de su investigación una cuestión política y mediática alejada del rol que la Constitución Nacional reconoce al Poder Judicial”.
Desde sectores políticos opositores al actual gobierno nacional salieron a criticar la postura oficial y exigieron que “se haga foco en las denuncias del juez Ramos Padilla”.