Siempre cuento que cuando empecé con este proyecto la idea era hacer tutorías para las chicas de barrio Santa Rosa sobre oficios de construcción. Que todo empezó porque en enero de 2019, hace un poquito más de un año, publiqué una foto en mi red social con los chicos de la obra, utilizando el hashtag “bendita tu eres”. Y la reflexión que me planteó esa foto, observar que era la única entre todo un equipo de varones, además profesional, significaba que yo había tenido ciertas oportunidades que otras mujeres no.
En el año 2019 capacitamos a más de 110 mujeres y sólo en el mes de enero a 80. Eso implica que la proyección para este año es llegar como mínimo al doble de mujeres que llegamos en nuestro primer año de trabajo. Y estos resultados son fruto de habernos involucrado en la sociedad de la que somos parte. Somos un equipo de mujeres que tomamos como eje de trabajo los objetivos de desarrollo sostenible planteados por Naciones Unidas y trabajamos en dos de ellos específicamente: igualdad de género y reducción de las desigualdades.
¿Sabían que las mujeres en nuestra provincia representamos el 51,3% de la población? Sabían que la representatividad de la mujer en la actividad de la construcción es del 6%? Y en el sector industrial del 19%? ¿Que la brecha salarial que nos diferencia de los hombres en el ámbito privado es del 24%? ¿Y que dentro de este ámbito representamos sólo el 32,8% de las personas ocupadas? Y además que solo el 8% de mujeres son las que ocupan puestos de decisión en la construcción.
Estos porcentajes necesitan revertirse ya. Para eso necesitamos decisiones políticas que incentiven estos cambios, es decir, leyes provinciales y ordenanzas municipales que garanticen la paridad al menos en obra pública. Y esto no sería menor, ya que la obra pública de la Provincia de Santa Fe en el año 2019 fue la de más actividad, después de capital y Gran Buenos Aires.
Por otro lado, necesitamos también de privados involucrados y dispuestos a ser parte de los temas de la actualidad. Así como entidades sociales que continúen esta lucha dentro de la sociedad. Y sobre todo que nosotras mismas seamos parte de estas esferas y podamos ocupar puestos de toma de decisiones. Las voluntarias que formamos parte de este proyecto no contamos con recursos para trabajar en el 2019, más que el apoyo que las empresas nos brindaron para nuestras capacitaciones y sin embargo miren todo lo que pudimos hacer a partir de tomar la decisión “ser el cambio que queremos ver en el mundo”.
Nos necesitamos, hoy más que nunca. Nuestro tiempo es hoy y tenemos que armar un plan de acción. Mujeres a la obra ya comenzó.
Arq. Ileana Rossi Seluy
Diplomada en Gestión de Desarrollo Sostenible
Fundadora de Mujeres a la obra