El pavimento en inmediaciones del cruce de las calles Urquiza y Cándido Pujato, llegando a la zona de bulevares de la ciudad de Santa Fe, volvió a registrar un hundimiento más precisamente frente a la vecinal Mariano Comas.
El mismo tiene unos cinco metros de largo por tres de ancho y un desnivel que se vuelve cada vez más profundo, denunciaron los vecinos del lugar.
Ese tramo ya había sido reparado en 2014 con trabajos millonarios a cargo de la empresa Aguas Santafesinas que colocó 70 metros de cañería para la nueva colectora cloacal, realizó el relleno del suelo, el compactado y la carpeta de hormigón armado.
Sin embargo, ya pasado varias años de finalizadas las obras, el problema se volvió a presentar por lo que la Municipalidad de Santa Fe tuvo que poner un vallado preventivo para evitar accidentes. Según publicó el Diario EL Litoral el 19 de febrero pasado el municipio había presentado ante la empresa de servicios públicos un reclamo.