En la ciudad de Santa Fe también hubo un reconocimiento a la figura de Diego Maradona, después de conocerse la noticia de su muerte ayer miércoles. El tradicional bar Napoli ubicado en Salta y 1 de mayo, frente a la municipalidad es uno de los lugares emblemáticos donde se pueden ver fotos y recuerdos de la ciudad italiana donde jugó el 10.
Esta mañana Julio González en el móvil de LT9, dialogó con su dueño Gustavo, quien contó que además de ser fanático de Maradona, tiene otros recuerdos en el bar como la camiseta del 10 cuando jugaba para Nápoli, una publicidad de las pastas Buitoni y hasta una bufanda con una frase de aliento al Nápoli, imágenes de diego, un reloj con la hora de la ciudad italiana. "Es un bar que pinta lo que es esa Italia de Maradona", sostuvo Julio mientras describía el lugar.
Gustavo estuvo tres veces en el estadio, lugar donde tiene parientes y amigos y sostuvo que "era como que se venía venir como lo vimos a Diego pero fue como una bomba atómica. Ayer estuve chateando con la gente de Nápoles y hay mucha conmoción y estupor porque lo adoran por todo lo que consiguió".
"La primera vez que fui era en 2015 y tenía como meta conocer el estadio, estaba lloviendo, le pedí a mi pariente que me lleve, era un miércoles y no había nadie en la calle, llegamos al estadio, y en una garita estaba un guardia de seguridad y estaba de mal humor. Mi pariente le dijo que éramos argentinos y cambió la cara rápidamente. Ahi nos llamó, nos mostró el teléfono que tenía una foto de Diego en la pantalla, nos abrió el estadio y nos hizo entrar, me pidió la cámara y nos sacó una foto en el San Paolo", agregó.
Además comentó que "soy uno de los pocos santafesinos que pisé el San Paolo, y es una pequeña anécdota que pinta lo que son los argentinos en Italia, por lo que significa la tradición, la venida de nuestros abuelos, y el nombre del bar es una referencia de donde empezó la historia de mi familia donde era mi nono. No pueden faltar las cosas más representativas entre ellas San Genaro y el Diego, que para ellos está a la altura del santo, y es un fenómeno social, hay que ir a verlo porque nadie lo puede contar".