En medio de las escenas de tensión y tras el ingreso sin control a Casa Rosada, se decidió retirar el féretro de Diego Armando Maradona del salón donde se realizaba el velatorio y se cortó el ingreso de personas a la sede gubernamental.
La determinación se tomó con el objetivo de intentar controlar la situación, que incluyó gases lacrimógenos dentro de la Casa de Gobierno y corridas y represión policial en las calles y avenidas de la Ciudad de Buenos Aires.
Según trascendió, el féretro fue llevado hasta el Salón de los Pueblos Originarios, y allí ingresaron Claudia Villafañe, Dalma y Giannina Maradona, y cerraron las puertas.
La situación inédita generó un caos nunca antes visto dentro de la sede gubernamental.
Por estas horas, familiares y autoridades deciden cómo seguirá la despedida del astro mundial del fútbol.