Un joven de 23 años fue detenido en Rosario como sospechoso de ser uno de los delincuentes que en mayo pasado atacaron de diez a balazos durante un procedimiento de rutina al policía Gabriel Sanabria, que aún permanece internado en estado delicado.
El operativo se llevó a cabo en una vivienda ubicada en Gallo al 1600, cerca del paredón del club El Torito, donde el pasado fin de semana fue hallado el cuerpo de un joven que tenía dos disparos en la espalda.
En la vivienda se hallaron dos armas de fuego, una calibre 9 milímetros y otra calibre 380, alrededor de 80 municiones, cerca de 200 mil pesos en efectivo, varios teléfonos celulares y una moto Honda Wave que tenía pedido de secuestro por robo.
El joven quedó a disposición de la fiscal Gisela Paolicelli, y será llevado a audiencia imputativa en los próximos días.