La sequía histórica que atraviesa una buena parte del territorio argentino en general y de la provincia de Santa Fe mostró por primera vez en mucho tiempo la peor cara de dos de los espejos de agua más conocidos en el norte santafesino.
Tal es el caso del arroyo Golondrina, conocido popularmente como "El Bonete", lugar muy frecuentado por los pescadores de la zona, que presenta solo un hilo de agua bajo el puente de la Ruta Provincial 98, que conecta los departamentos Vera y 9 de Julio.
Antes y ahora. El arroyo Golondrina en creciente y en sequía
El caso es más grave en la Laguna El Cristal, cuyo predio está administrado por el área turística de la Municipalidad de Calchaquí, está completamente seca. El espejo de agua fue declarado como Reserva de Vida Silvestre en 1992 y es la sede de una tradicional fiesta que se realiza durante el verano todos los años. Además, sirve como escape de fin de semana para los habitantes del norte de la provincia.
Vista aérea de la Laguna El Cristal
totalmente seca. Gentileza FM Vida Fortín Olmos
Ahora, con una bajante sostenida desde fines de 2019 y principios del 2020, la laguna y sus afluentes quedaron totalmente secos, y la zona de pastizales también está siendo afectada, ya que como espacio verde solo están quedando las áreas de monte y bosques, según se puede apreciar en las imágenes aéreas.
Una luz de esperanza
A principios de enero, el ingeniero del INA, Juan Borus, reconoció en diálogo con Informe 1150 que la bajante de los ríos era la "más importante de la historia argentina".
Sin embargo, el especialista auguró que tras más de tres años, la sequía podría llegar a su fin este 2023.
"Estimamos que a partir del otoño empezará a normalizarse la situación. La producción agropecuaria necesita lluvias y esta normalización beneficiará al sector a mediano plazo", había manifestado en una nota con Germán Dellamónica.