El 28 de febrero es un día histórico para Atlético de Rafaela. En 1971, hace 52 años, se corrieron en el autódromo de Rafaela las 300 Indy: fue la primera y única vez que los autos de la hoy Indy Car (los mismos que corren las míticas 500 Millas de Indianápolis) se presentarn en Argentina. Rafaela tenía menos de 50 mil habitantes en ese momento, pero el autódromo albergó a una multitud que superaba la población total de la ciudad para un evento internacional que marcó a fuego al deporte rafaelino. Y todo se logró con el esfuerzo y el riesgo de un grupo de dirigentes que llegaron a hipotecar propiedades individuales para cumplir el sueño con el que ya en 1926 se desvelaban los organizadores de las 500 Millas Argentinas.
Este 28 de febrero también pasará a la historia. Fue el martes pasado, cuando dirigentes del club firmaron con un empresario privado - radicado actualmente fuera del país- un convenio que apunta a un objetivo igual de alto que aquél que animó a los pioneros del automovilismo: un desarrollo inmobiliario que implicará la urbanización de más de 150 hectáreas, de las cuales 12 has. pasarán a formar parte del patrimonio del club. Justo enfrente del predio del autódromo, hacia el Sur, separados sólo por una calle. Y allí, en ese nuevo predio, se levantará el nuevo estadio de fútbol.
El megaproyecto fue presentado en la mañana de este jueves por la dirigencia de la entidad, encabezada por el Dr. Silvio Fontanini, quien dejará su cargo en abril, en medio de un proceso interno que por segunda vez en la historia del club llevará a los socios a las urnas para votar entre dos listas. Más allá de la coyuntura politica, el proyecto del nuevo estadio es furor en Rafaela.
La idea es construir un estadio con capacidad inicial para 18 mil espectadores -el mínimo exigido para partidos de carácter internacional-, pero escalable hasta llegar a 30 mil ubicaciones. El lugar es ideal: está calle de por medio con el autódromo, tiene accesos directos desde las rutas nacional 34 y provincial 70; y se ubica a mil metros del Centro de Monitoreo Municipal, la Guardia Urbana de Rafaela y el nuevo Hospital.
Con frente sobre Bv. Lehmann y la avenida Eduardo Ricotti (utilizada como traza del tránsito pesado en la actualidad), el predio albergará playas de estacionamiento, un gimnasio cubierto e instalaciones para la práctica de otros deportes, así como accesos independientes para Prensa y servicios de emergencias. Hacia el Este, se lotearán una veintena de hectáreas para radicación de empresas de servicios. Sólo hacia el Sur, y con un "colchón" restringido para cualquier construcción -hay un canal que atraviesa en forma oblicua de sudoeste a noreste el predio completoa urbanizar, que tiene en total más de 150 hectáreas-, se pondrán a la venta 1.345 lotes individuales destinados a viviendas particulares. De la venta de los lotes saldrá el dinero para financiar la construcción del estadio, manejado por un fideicomiso con fines específicos.
Ya se han iniciado los primeros trámites para lograr la factibilidad ambiental y los permisos para iniciar la urbanización. Aunque nadie se atreve a hablar de plazos, todo apunta a que este mismo año puedan completarse la documentación, permisos y otros aspectos legales y técnicos como para que la piedra fundamental sea colocada en 2024 y en pocos años la Crema deje su histórica ubicación en el barrio Alberdi para mudarse a un estadio moderno, cómodo y seguro.