El gobernador catamarqueño Raúl Jalil logró su reelección al obtener un 53% de los votos en las elecciones provinciales. El mandatario peronista, que unificó la contienda con las elecciones generales nacionales, consolidó el resultado que había obtenido en las PASO locales de agosto, cuando había asfaltado el camino al triunfo superando el también el 50%. Así, Jalil aportó al blindaje que Unión por la Patria (UP) construyó en el norte del país, donde contra más gobernaciones.

En tanto, La Libertad Avanza (LLA), con José Jalil Colomé -primo del gobernador-, cosechó un 25% y terminó en segundo lugar. Juntos por el Cambio (JxC), con el senador radical Flavio Fama, que en agosto se impuso en la interna del colectivo amarillo frente al diputado nacional de la Coalición Cívica (CC) Rubén Manzi, terminó en tercer lugar con un 21%.

Junto a su actual vicegobernador, Rubén Dusso, Jalil seguirá gestionando por cuatro años un distrito clave para el futuro económico del país, ya que Catamarca es central en el estratégico triángulo del litio. Al calor del boom minero, tanto el oficialismo local como nacional contaban en la previa con una valoración positiva por parte de la población, y en las elecciones provinciales pudieron usufructuarla.

En ese sentido, en agosto Sergio Massa había sido el presidencial más votado en Catamarca. Uno de los pocos distritos donde UP había logrado esquivar la ola violeta de los libertarios. Y un ejemplo de tracción de abajo hacia arriba que Massa inculcó en los pares norteños de Jalil. Ahora, Massa volvió a repetir su triunfo en ese distrito.

La participación en la contienda fue de un 72%, en un padrón de 340.168 electores (Catamarca representa un 0,96% del padrón nacional). Jalil, además, garantizó su gobernabilidad tanto a nivel legislativo como territorial, ya que los catamarqueños también eligieron a nivel local 8 senadores provinciales, 20 diputados provinciales, 34 intendentes y concejales, que quedaron mayormente en manos del oficialismo peronista.