Por 6 votos contra 5, la corte le dio un respiro a Lula hasta su próxima sesión, lo cual deja congelada cualquier decisión que la semana que viene tome el tribunal de apelaciones de Porto Alegre, entre ellas una eventual orden de prisión del ex presidente.
El defensor de Lula, Roberto Batocchio, pidió y consiguió que la corte enviara esta noche un informe urgente al Tribunal Regional 4 de Porto Alegre indicando que no puede pedirle al juez Sérgio Moro, a cargo de la Operación Lava Jato en primera instancia, proceder a la detención del ex presidente.
El tribunal de Porto Alegre tiene previsto sesionar el lunes para rechazar los recursos de queja de la defensa de Lula y proceder a ordenar la ejecución de la pena de 12 años y un mes de cárcel por corrupción para el ex mandatario.
Lula presentó un habeas corpus contra su pérdida de libertad eventual al considerar que sólo puede ser arrestado una vez agotadas las tres instancias judiciales.
La corte en 2016 sentó jurisprudencia para detener a condenados en segunda instancia, pero esta excepción choca contra la Constitución vigente.
Así, Lula ganó oxígeno hasta el 4 de abril, cuando los ministros deben tomar una decisión sobre la libertad del ex presidente que afectará a miles de condenados en segunda instancia detenidos desde 2016.
La sesión se alargó más de lo debido porque hubo un amplio debate sobre si dar luz verde a tratar el habeas corpus, una votación vencida por 7 a 4 a favor del ex presidente.
"A pesar de todas estas posiciones nadie sabe cómo será el resultado de la cuestión de mérito, hoy se votó otra cosa, no el mérito del habeas corpus", explicó la presidenta del tribunal, Carmen Lucia Antunes.
El país estuvo detenido mirando la sesión por TV, que se extendió por casi cuatro horas.
Gilmar Mendes, el juez que declaró que es un férreo opositor al Partido de los Trabajadores, defendió el derecho del líder de esa fuerza a pedir un habeas corpus.
"No debe ser privilegiado Lula por ser expresidente pero tampoco puede ser perseguido por esto. No debe quedar desprotegido", dijo Mendes al defender el congelamiento de la medida.
La decisión abre un impasse sobre todo porque cualquier orden de prisión del tribunal de Porto Alegreno tendrá efecto, pero le pondrá presión, para un lado o para el otro, a cada ministro de la corte en la sesión del 4 de abril. (efe)