"Presunto incendio", así ha calificado el fiscal general de Venezuela, Tarek Saab, lo sucedido este miércoles en el centro de reclusión de la Comandancia Estatal de Carabobo, en el centro del país.

Hay al menos 68 personas muertas. Según los primeros datos, el incidente se ha produjo pasadas las 04:00 horas locales (08:00 GMT) tras un motín.

"El Ministerio Público informa a la opinión pública que ante los terribles hechos acaecidos en la Comandancia de la Policía del Estado Carabobo, donde por un presunto incendio fallecieron 68 personas, hemos designado 4 fiscales para esclarecer estos dramáticos hechos",  dijo Saab en su cuenta de Twitter.

Según Saab, tras las "indagaciones preliminares", son 66 los hombres muertos así como dos mujeres "que se encontraban en calidad de visitantes (pernocta)" y que a todos "se les realizaron los respectivos protocolos de autopsia y entrega respectiva de los cuerpos a sus familiares".

El fiscal ha asegurado que iniciarán las investigaciones pertinentes para "esclarecer de forma inmediata estos dolorosos acontecimientos". Medios locales han informado por la mañana de la muerte de cinco reclusos y de dos policías heridos, sin embargo, otros portales digitales ya facilitaban datos durante la tarde noche de este miércoles que elevaban a más de 70 el total de víctimas fatales.

Según han denunciado a EFE familiares de los internos en los alrededores de la comisaría de policía, los fallecidos perecieron por asfixia y quemaduras.

"No nos han dicho nada. Pido que (las fuerzas del orden) no los traten como perros, que no les lancen gasolina, les lanzaban plomo (disparaban) para adentro como si ellos fueran perros", ha dicho a periodistas Lissette Mendoza, madre del preso Yorman Salazar, de 19 años.

"Él está detenido por robo, pero no por eso pueden quitarle la vida como si él fuera un perro", ha añadido la trabajadora del hogar de 35 años sobre los hechos.