Los ministros de Exteriores de los países del G7 y el Alto Representante de la UE para Política Exterior y Seguridad Común, Josep Borrell, han mostrado su rechazo al anuncio del ministro de Finanzas israelí, el ultraderechista Bezalel Smotrich, sobre la legalización de cinco asentamientos en Cisjordania, así como la decisión de construir otras 5.300 unidades de vivienda en asentamientos y establecer otros tres en los territorios palestinos. 

El anuncio hecho por Israel sobre la expansión de los asentamientos, es la mayor realizada desde los Acuerdos de Oslo, medidas que, la UE y el G7 han descrito como "inconsistentes" con el Derecho Internacional y "contraproducentes para la causa de la paz". 

"Reafirmamos nuestro compromiso con una paz duradera y sostenible que vaya en línea con las resoluciones pertinentes del Consejo de Seguridad de la ONU, sobre la base de una solución de dos Estados", han dicho a través de un comunicado conjunto, en el que han reiterado su oposición a la expansión de los asentamientos. 

"Instamos al Gobierno de Israel a que revoque esta decisión", han recalcado. Asimismo, han incidido en que "mantener la estabilidad económica en Cisjordania es clave para la seguridad regional" y han reconocido que, si bien las autoridades israelíes han entregado recientemente parte de los fondos recaudados en nombre de la Autoridad Palestina, son necesarios más pasos para transferir la totalidad del montante debido. 

"Reclamamos a Israel que libere todos los ingresos de liquidación retenidos de conformidad con los Protocolos de París, elimine o relaje las medidas que exacerban la situación económica en Cisjordania y tome las medidas necesarias para garantizar que los servicios bancarios correspondientes entre los bancos israelíes y palestinos sigan funcionando, con los controles adecuados", han zanjado. 

Smotrich anunció a finales de junio la legalización de cinco asentamientos en Cisjordania en respuesta al reconocimiento del Estado de Palestina por parte de España, Noruega, Irlanda, Eslovenia y Armenia. 

Todos los asentamientos son ilegales según el Derecho Internacional, si bien Israel distingue entre aquellos a los que ha dado permiso y a los que no. 

Previamente, el Gobierno había anunciado que autorizaba el retorno de colonos a tres asentamientos en Cisjordania evacuados en el marco del 'Plan de Desconexión' de 2005, que supuso la retirada de Israel de la Franja de Gaza y varios asentamientos en Cisjordania, mientras que la semana pasada confirmó la confiscación de terrenos en esta parte de los Territorios Palestinos Ocupados.