El juez brasileño Sérgio Moro ordenó este jueves la captura del ex presidente Luiz Inácio Lula da SIlva, a quien le dio plazo hasta mañana para presentarse en en la sede de la Policía Federal para cumplir su condena a 12 años y un mes de prisión.
La orden de detención surge luego que este miércoles la Corte Federal de Brasil rechazara el habeas corpus con el que se solicitaba mantener su libertad, en la que durante más de diez horas, seis de los 11 magistrados rechazaron el habeas corpus, lo que aceleró la orden de detención.
Moro escribió en su fallo que "en atención a la dignidad del cargo que ocupó, le concedo (a Lula) la oportunidad para presentarse voluntariamente a la Policía Federal en Curitiba hasta las 17 de mañana".
Por otra parte, el abogado de Lula, Roberto Batocchio, sostuvo que "vamos a ver las medidas que vamos a tomar, pero no admitimos vivir sobre el autoritiarismo judicial. No se agotaron los plazos todavía".
"Mi impresión es que Lula no se ausentará", dijo el abogado de Lula al ser preguntado sobre si se entregará o esperará a los agentes de la Policía Federal.
"La idea fija de Moro y esa gente es mantenerme por lo menos un día preso; Moro actúa políticamente", dijo el propio Lula al periodista Kennedy Alencar, de la radio CBN, quien tras conocer la decisión se marchó hacia la sede de su cuna política, el Sindicato de Metalúrgicos de Sao Bernardo do Campo, en San Pablo. Allí también llegó la expresidenta Dilma Rousseff para un acto que se realizará esta noche y para el cual se esperaba un discurso del ex presidente.