El ministro de Ultramar, François-Noël Buffet, anunció ayer, la entrada en vigencia de la declaración del estado de calamidad natural en el archipiélago francés de Mayotte tras el paso del ciclón 'Chido', que ha dejado al menos una treintena de muertos, si bien siga aumentando a medida que continúa la búsqueda de víctimas.
"Ante esta situación excepcional, es necesario desplegar medios excepcionales para restablecer rápidamente los servicios y que permitan ejecutar un plan de reconstrucción sostenible para Mayotte.
Deben movilizarse todos los recursos para ayudar y apoyar a nuestro pueblo en tan terrible momento", ha subrayado. Esta medida, que tiene un periodo inicial de un mes, permite una gestión "más rápida y eficaz de la crisis" y facilitar la emergencia, puesto que permite una mayor capacidad de respuesta a las autoridades locales y nacionales, al tiempo que procedimientos administrativos.
Las autoridades de Mayotte, ubicado en el océano Índico entre Madagascar y Mozambique, han elevado este jueves a 33, el balance de víctimas --aunque las primeras sospechas apuntaban a cientos de muertos y notables destrozos-- por el paso del ciclón que ha afectado a otros países de la región, como Mozambique, donde también se han registrado decenas de fallecidos, señala un reporte de la agencia Europa Press.