"La vida judía ocupa un lugar inamovible en nuestro país", declaró la canciller Angela Merkel a través de un portavoz, en declaraciones recogidas por el diario berlinés "Tagesspiegel".
"No podemos permitir jamás que el antisemitismo vuelva a ser algo cotidiano en Alemania", dijo también a "Tagesspiegel" el ministro de Exteriores alemán, el socialdemócrata Heiko Maas.
En esa misma línea se expresó su colega de gabinete, la ministra socialdemócrata de Justicia, Katarina Barley: "A quien agrede o insulta a judíos o judías, a quien ataca o ensucia con pintadas sus sinagogas o cementerios hay que obligarlo a asumir su responsabilidad con todos los medios de nuestro Estado de Derecho".
La semana pasada, las imágenes de un joven refugiado sirio insultando y golpeando con un cinturón a otro joven israelí de origen árabe que llevaba kipá se convirtieron en virales y desataron un debate sobre el antisemitismo en Alemania.
Los ciudadanos de Berlín y de otras ciudades de Alemania bestán llamados hoy a llevar durante todo el día puesta una kipá en señal de solidaridad con las víctimas de ataques antisemitas perpetrados días atrás en el país.
La iniciativa ha sido convocada por la principal organización judía de Alemania, que desde hace semanas y a raíz de varios episodios violentos perpetrados contra judíos viene denunciando la situación que sufren los miembros de su comunidad en su día a día.
En la tarde de hoy están previstas además en Berlín y otras ciudades alemanas manifestaciones en contra del antisemitismo.