El papa Francisco llamó por teléfono este domingo a la familia de Héctor Cornalis, un hombre secuestrado y asesinado en la localidad santafesina de María Juana, para decirles que “reza por ellos” y pedirles fe.

Julieta Cornalis, hija de Héctor, dijo a El Periódico que la comunicación “fue de sorpresa, llamó ayer domingo cerca de las 11 de la mañana a mi mamá. Llamó preguntando si era Patricia Suppo, diciendo que era el Papa Francisco, y enseguida aclarándole que no era una broma”.

“Mi mamá le volvió a preguntar, porque no podía creerle, y él le repetía que era él y le informó quién era el contacto. En realidad una compañera de la escuela le escribió, contándole la situación, pidiéndole que nos tuviera presentes en sus oraciones, desconozco bien lo que le escribieron, pero se ve que en algún punto lo conmovió y llamó a mi mamá”, aseguró la joven.

Desde el entorno de Julieta manifestaron que Jorge Bergoglio antes intentó comunicarse en dos oportunidades con la familia, sin conseguirlo.

PAPA FRANCISCO

El Sumo Pontífice de la Iglesia Católica “no fue tan extenso”, de acuerdo con palabras de la mujer. “Principalmente dijo que iba a rezar por nosotros, para darnos fuerzas y que tengamos fe. La conversación fue siempre en torno a eso, para que nosotros tengamos fuerzas. Obviamente mi mama le pidió que siguiera rezando para que encontremos justicia y no perdamos la fe ante tantas situaciones que estamos pasando”, relató.

La familia profesa la religión católica. Patricia Suppo, viuda de Cornalis, es directora de la Escuela Particular Incorporada Nº 1.066 “Santa María de los Ángeles”. Sus hijos asistieron a dicho establecimiento.

“Estaba súper emocionada, en estos momentos estoy en San Francisco porque estamos todos aislados por Covid-19. Yo quedé acá y mi mamá en María Juana. Lo primero que hizo después de hablar con Francisco fue llamar a la persona que realizó el contacto. Esa persona lo confirmó, y después empezó a contarme a mí y a todos los familiares y amigos de ella”, dijo Julieta.

La joven manifestó que el llamado del Papa “es una caricia al alma. Después de todo lo que nos está pasando, esto nos da muchas más esperanzas de las que ya teníamos. Esperemos que se logre justicia y podamos seguir adelante”, cerró.

EL CASO

Héctor Cornalis se desempeñaba como tesorero de la Cooperativa 22 de Marzo, jurisdicción de Estolia, en Santa Fe.

Al menos tres personas lo secuestraron el pasado 16 de abril, con el objetivo de robarle la recaudación, casi 9 millones de pesos.

Pero el secuestro salió mal, ya que los delincuentes se excedieron con los golpes y terminaron matando a Cornalis. Viendo que no reaccionaba, lo dejaron maniatado en el baúl del automóvil junto al dinero, que paradójicamente jamás hallaron.

Por el caso hay tres detenidos. El principal acusado es Roberto Martín Andini (38), alias “Sombra”, señalado como el autor intelectual del secuestro y homicidio de Cornalis.

La esposa de Cornalis relató que “Sombra” solía trabajar en la Cooperativa de su marido. “Dejó de pertenecer a la cooperativa porque lo encontraron robando. La primera vez lo perdonaron y lo dejaron seguir. Después volvió a cometer un robo más importante y lo despidieron. Pero se quedó a vivir un tiempo más, le permitieron que encontrara algo antes de irse del lugar. Es una persona con la que compartimos muchas cosas”, relató.

El fiscal de la causa dijo a El Ciudadano Web que “el hecho ilícito que se le atribuye al imputado es haber diseñado y organizado un plan para privar de la libertad a Cornalis, robarle dinero de la Cooperativa 22 de Marzo que la víctima tenía en su poder por ser el tesorero, y luego repartir el botín”.

Cuando Cornalis llegó a su trabajo, “lo golpearon ferozmente, lo subieron malherido y atado de pies y manos en el asiento trasero del vehículo en el que había llegado al lugar y tomaron la ruta 13 para ir a la casa de la víctima”, continuó el fiscal.

“El principal imputado estaba en el lugar, pero no participó de la agresión. Se fue por un camino de tierra a su casa para continuar según el plan previsto de antemano”, abundó.

Finalmente, al ver que Cornalis no reaccionaba, “dejaron abandonado el vehículo en un camino rural en jurisdicción de Colonia Cello, con el cuerpo de la víctima en el asiento trasero y sin haber perpetrado el robo”, cerró el funcionario.

Para el fiscal, el caso está esclarecido. Si se comprueba que los acusados cometieron el asesinato, les espera un largo tiempo en la cárcel.

Fuente: La Voz del Interior.