El video que se viralizó, hace una semana, donde el Juez Rodolfo Mingarini libera a un acusado por abuso sexual argumentando que no podía "relacionar y entrar en la lógica de colocarse el profiláctico para tener esta relación cuando tiene que estar sometiendo a la víctima (…) es posible que haya habido esta relación no consentida, es posible, pero no tenemos suficiente evidencia", nos llevó al colectivo Ni Una Menos a reclamar y exigir que la Corte Suprema de Justicia intervenga y haga una investigación a este Juez, porque consideramos que se violan nuestros derechos y garantías y porque no podemos permitir nunca más este tipo de argumentos machistas y misóginos.

Este 3 de Junio pasado nos encontró -como hace seis años lo venimos haciendo-  luchando contra la violencia de género en una sociedad donde permanentemente las mujeres y disidencias somos vulneradas en nuestros derechos.

Vamos avanzando muy lentamente. Pretendemos que se visibilicen y se tome conciencia sobre nuestros reclamos, pero estamos convencidas que, si se sigue impartiendo Justicia de este modo, donde la víctima sea puesta en duda, donde no se tengan en cuenta los análisis a través de una perspectiva de género y donde se sigan reproduciendo estereotipos patriarcales, se van a seguir reproduciendo este tipo de fallos.

Queremos que se implemente y profundice a la mayor brevedad la capacitación en Ley Micaela a los Poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial tal como lo expresa dicha ley y que sea obligatoria, sin excusas ni dilaciones.

Nosotras hemos denunciado muchas veces a estos jueces, y vamos a seguir exigiendo que, si se siguen reiterando estos fallos, que se tomen todas las medidas y sanciones acordes a los cambios que se están generando en la sociedad, ya que es nuestro movimiento de mujeres y disidencias, el motor fundamental de esta transformación.

Demás está decir que escuchar y ver el video de Mingarini resulta denigrante y ofensivo para todo nuestro colectivo.  Pedimos que se expidan con celeridad en la investigación que se lleva a cabo, pretendiendo que sea ejemplificadora para que nunca más las víctimas sean invisibilizadas.

Reclamamos también que se instrumenten mecanismos necesarios para una reforma judicial, acorde a estos tiempos y que deje de ser una institución aislada de las necesidades de las y los ciudadanos.

Decimos BASTA de impunidad en la justicia porque no hay Ni una Menos sin una justicia feminista y disidente.

*La autora es Profesora de Historia, Feminista peronista, e integrante de la Mesa Ni Una Menos - Mujeres Por la Paridad